Paciencia: Vale la espera

Paciencia perdida

David Shenk ama la velocidad del internet, la gratificación instantánea del e-mail y la conveniencia de comprar en línea. Pero también sabe que estas conveniencias modernas y sus estilos de vida que ellos aceleran tienen un costo.

"Estamos empacando más en nuestras vidas," dice Shenk, autor de The End of Patience, "and losing patience in the process." En su libro, Shenk mantiene que "Hemos logrado condensar el tiempo a tal punto que ahora estamos terriblemente conscientes de cada segundo en el que esperamos algo."

Demasiada tecnología

No son solo módems, ]]>teléfonos celulares]]> y la espera telefónica llevan nuestra habilidad a esperar. Se extiende a elevadores, centros comerciales, el gimnasio y aun a las gasolineras. Por lo menos una gran cadena hotelera del noreste ha instalado nuevos monitores de internet en sus elevadores. En muchos centros de acondicionamiento físico, usted puede surfear la red y pedalear al mismo tiempo. Y una compañía en Norfolk, Virginia está fabricando monitores de televisión que pueden ser colocados en islas de gasolineras, de esta forma usted puede ver las noticias mientras espera su gasolina.

En teoría, los avances de la tecnología deberían de dar tiempo para hacer otras cosas, pero en la práctica, estos tienden a perpetuar la necesidad de más grande velocidad para siempre. Shenk y otros creen que esta adicción a la conveniencia puede venir a un alto costo. Cuando no hay tiempo para esperar, con frecuencia no hay tiempo para pensar, conectarse con otras personas a niveles profundos o a crear memorias pasadas.

"El peligro real es la potencial desaparición de la espiritualidad," explica Shenk. "Es difícil sentir las riquezas de estar vivo cuando has adquirido estos impulsos electrónicos distractores (interrumpiendo) tus pensamientos."

¿Es la paciencia todavía una virtud?

La paciencia puede ser definida por una cantidad de formas, pero reduce la habilidad de esperar tranquilamente antes de tomar acción y/o aceptar eventos que no pueden ser controlados.

"No cualquiera tiene que creer el viejo aforismo de que la paciencia es una virtud," dice Joseph Tecce, profesor de psicología en Boston College. "Pero todos tienen que darse cuenta de que la paciencia tiene una cantidad de consecuencias recompensantes que pueden aumentar la felicidad a largo plazo."

La paciencia es un esfuerzo

Tecce, quien iguala la paciencia con la templanza, explica que la gente que desarrolla paciencia se da a sí misma más opciones, y por tanto mayor libertad de manejar más efectivamente cada situación que se presenta. "Contener pacientemente, arranques cuando se está frustrado, temeroso o enojado pone a la gente en carga de sus decisiones y evita las consecuencias negativas de los arranques temperamentales," el explica.

Y los efectos secundarios negativos no solo se aplican a las relaciones con otros. "Si no aprendemos a ser pacientes, es probable que suframos de ansiedad y frustración," dice Rachel Harris, PhD, autora de 20-minute Retreats ," el cual incluye un capítulo acerca de incorporar la paciencia a la vida diaria. Harris mantiene que la paciencia, mientras no es una virtud natural, es necesaria para la madurez emocional y espiritual.

"Tener paciencia cambia nuestra perspectiva, permitiendo abrirnos a lo que de hecho está sucediendo en el momento presente," ella escribe.

El poder sanador de la paciencia

Los expertos concuerdan que la cultura moderna, con su énfasis en multi-tareas y control, devalúan típicamente la importancia de la paciencia, la cual con frecuencia es percibida como tiempo perdido. Ellos sostienen que todo lo contrario es verdad. La verdadera paciencia no se debería confundir con la mansedumbre, en la cual el temor o la falta de disciplina lleva a la inactividad.

En Healing Anger: The Power of Patience from a Buddhist Perspective , el Dalai Lama aclara la necesidad y la dificultad de practicar la paciencia: "...sólo a través de la paciencia uno es capaz de sobreponerse a los obstáculos a la compasión... Debido a que la paciencia viene de una cierta habilidad de permanecer firme... uno no debería ver la paciencia como un signo de debilidad, sino como un símbolo de fuerza proveniente de una profunda habilidad de mantenerse firme."

En el budismo, existen diferentes niveles de paciencia, pero todos son alcanzados por intentos siempre expansivos en el auto-control. Cuando una persona es verdaderamente paciente, el entendimiento rápidamente suplanta a la ]]>ira]]> y potencia a los individuos a permanecer tranquilos y resolver los problemas de forma más efectiva.

Vale la espera

David Shenk sabía que estaba en el sendero con su mensaje de moderación cuando el empezó a notar de que forma la gente realmente inteligente, realmente exitosa gastaba su tiempo.

"Todos están haciendo estas duras decisiones. Son muy disciplinados," dice. "Ellos gastan una enorme cantidad de tiempo pensando cuidadosamente."

Hay recompensas, Shenk reconoce, por limitar el tiempo que pasa en su computadora y escoger leer un libro en lugar de ver las noticias de la noche. Pero estas son recompensas con las que él puede vivir, porque ellas directamente aumentan su calidad de vida.

"Creo que cada cosa que realmente valoramos en nuestras vidas está fundado sobre cosas más simples," mantiene.

Practicando paciencia

Con las presiones de fechas límite y agendas, ¿dónde está el tiempo para practicar la paciencia?

He aquí algunos consejos para comenzar:

• Recuerde respirar
• Una de las mini-retiradas de Rachel Harris se enfoca en dejar ir la impaciencia tomando un respiro profundo, después permitiendo que sus expectativas salgan mientras exhala.
• Ponga atención a los detalles
• Harris también anima otras prontas retiradas. Cuando usted prepare té, no intente hacer nada a propósito mientras usted espera a que el agua hierva. Disfrute el té y el tiempo "vacío" aumentará su conciencia de paciencia. Cuidar un jardín requiere de paciencia porque el crecimiento de las plantas solo puede ser apreciado con el paso del tiempo.
• Cree consecuencias
• El doctor Tecce recomienda establecer repercusiones para usted mismo si cae en comportamiento impaciente. Por ejemplo, si usted renuncia a comportamiento compulsivo, decida en una consecuencia si pierde la paciencia y empiece a jurar.
• Coma correctamente y descanse
• Desde el exceso de ]]>cafeína]]> hasta la falta de sueño, las fuerzas biológicas pueden jugar una parte al poner los frenos en su habilidad de reprimir el enojo, según Tecce.
• Haga las elecciones difíciles
• Ya sea que practique ]]>yoga]]> , ponga un límite de tiempo al uso diario de la computadora, decida imprimir materiales de lectura en lugar de leerlos en línea o apague la televisión de forma que usted se pueda reconectar con su familia, entienda las grandes recompensas de establecer sus propios límites, aconseja Shenk. Asignar tiempo para pensar, leer y hablar requiere de paciencia y disciplina, pero el orgullo y felicidad resultantes hace los sacrificios más significativos.

Incorporar la paciencia a la vida diaria no será instantáneo, ¿pero no es ese el punto?