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Definición

La anemia]]> aplásica es una enfermedad no contagiosa que se manifiesta cuando la médula ósea deja de producir células sanguíneas. La médula ósea es la parte interna, esponjosa y roja del hueso que es responsable de proporcionar al cuerpo tres tipos de células sanguíneas: glóbulos rojos que aportan oxígeno a todas las partes del cuerpo, glóbulos blancos que protegen al cuerpo de gérmenes y plaquetas que son necesarias para la coagulación de la sangre. Esta enfermedad puede afectar a cualquier persona de cualquier edad, raza o género.

La anemia aplásica puede diagnosticarse como idiopática, es decir, con causa desconocida pero, usualmente, puede deberse a factores ambientales. En casos muy raros, la anemia aplástica puede ser hereditaria.

La gravedad de esta enfermedad puede variar de leve a severa. Si usted sospecha que tiene esta condición, consulte a su médico inmediatamente.

Ubicación de una Médula Osea Activa en un Adulto

imagen informativa de Nucleus
© 2009 Nucleus Medical Art, Inc.

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Causas

Se cree que la anemia aplástica es causada por el propio sistema inmune del paciente que ataca la médula ósea, interfiriendo con la producción de células sanguíneas. En algunos casos, la anemia aplástica es un efecto secundario temporal de un medicamento y se puede revertir si se detiene la exposición a la causa.

Factores de riesgo

Un factor de riesgo contribuye a una enfermedad o la provoca. Los siguientes factores de riesgo pueden contribuir al desarrollo de la anemia aplástica:

  • Exposición a algunas toxinas ambientales como las que se encuentran en la gasolina, pintura, aceite y emisiones de carbón, y solventes industriales.
  • Tratamientos de alta dosis de radiación y quimioterapia
  • Algunos virus
  • Ciertos medicamentos (por ejemplo, antibióticos, algunas drogas ilegales, medicamentos utilizados para tratar la artritis reumatoide]]>)
  • Enfermedades de la médula ósea
  • En el embarazo
  • Causas desconocidas

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Síntomas

Si experimenta cualquiera de estos síntomas no asuma que se debe a la anemia aplástica. Estos síntomas podrían ser causados por otras condiciones de salud menos serias. Si usted experimenta alguno de ellos, consulte a su médico.

  • Fatiga
  • Falta de aliento con el esfuerzo
  • Debilidad
  • Latido acelerado
  • Piel pálida
  • Moretones de fácil aparición
  • Infecciones frecuentes
  • Sangrado nasal]]> y encías sangrantes
  • Sangrado prolongado de cortadas
  • Erupción cutánea
  • Fiebre
  • Lapso disminuido de atención

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Diagnóstico

El médico le preguntará acerca de sus síntomas y antecedentes clínicos, y le realizará un examen físico. Las pruebas para diagnosticar la anemia aplástica incluyen:

  • Examen de sangre: se toma una muestra de sangre para determinar si tiene conteos por debajo de lo normal de dos o más tipos de células sanguíneas (glóbulos rojos, glóbulos blancos o plaquetas).
  • Biopsia de la médula ósea]]>: este procedimiento permite al médico tomar una pequeña muestra intacta de la médula ósea. La muestra es examinada bajo microscopio para descartar otras posibles enfermedades relacionadas con la sangre y para determinar la cantidad y calidad de las células de su médula ósea. En la anemia aplásica, la médula ósea contendrá menos células sanguíneas de lo normal.

Una vez que usted es diagnosticado con anemia aplástica, podría necesitar pruebas adicionales para determinar la causa subyacente.

Para evaluación y tratamiento adicional, será derivado a un especialista en trastornos de la sangre, un hematólogo o un centro de tratamientos especiales para tratar la anemia aplásica.

Tratamiento

Consulte con el médico acerca del mejor plan de tratamiento para usted. El tratamiento para la anemia aplásica varía según la severidad y la causa.

Transfusiones Sanguíneas

Las transfusiones sanguíneas abastecen las células sanguíneas que la médula ósea ha dejado de producir. Esto no es una cura pero en su lugar ayuda a aliviar los síntomas.

Medicamentos inmunosupresores

Estos medicamentos alteran o suprimen a su sistema inmune para evitar que dañe a las células sanguíneas de la médula ósea. Esto da tiempo a su médula ósea para recuperarse y comenzar a producir células sanguíneas nuevamente. Los medicamentos usados son globulina antitimocito (ATG) y ciclosporina. Algunas veces se usan en combinación con esteroides para aminorar los efectos secundarios. A menudo este tratamiento requiere hospitalización breve.

Trasplante de médula ósea

El reemplazo de médula ósea enferma con médula ósea sana es la mejor opción de tratamiento para algunas personas con anemia aplástica severa. Para lograr un trasplante exitoso, necesita un donante cuya médula ósea coincida en la mayor medida posible con la médula de usted.

Otros Tratamientos

Pueden ser suficientes otros tratamientos si la anemia aplástica es de leve a moderada y es causada por la exposición a radiación, químicos o medicamentos, la observación y la descontinuación inmediata de la causa identificada para restaurar la función normal de la médula ósea.

Si le diagnostican anemia aplásica, siga las instrucciones del médico.

Prevención

Si bien la mayoría de los casos de anemia aplásica no pueden prevenirse, la limitación de la exposición a ciertas toxinas ambientales, como las halladas en emisiones de gasolina, pintura, aceite y carbón y en solventes industriales, puede reducir el riesgo de contraer la enfermedad.