Meses después de que el padre de Rick muriera, la esposa de éste empezó a preocuparse acerca de su marido. "Rick nunca ha llorado o hablado acerca de la muerte de su padre," dice. "Ahora pasa la mayor parte de su tiempo libre trabajando en su viejo Chevy modelo 58 que él y su padre habían comprado justo antes de morir. Estoy preocupada de que él no está manejando la muerte de su padre de una manera saludable."
Generalmente, los hombres y las mujeres no responde al dolor de la misma manera. "Es un evento de la vida normal lo que los lanza a la inestabilidad," dice Tom Golden, L.C.S.W., consejero internacionalmente conocido y autor de Swallowed by a Snake: The Gift of the Masculine Side of Healing .
Aquí se dice el por qué los hombres se afligen por la muerte, el divorcio y otras pérdidas de la manera en que lo hacen.
Lo que Cathy percibe como una respuesta no saludable es en realidad una saludable. El comportamiento de Rick es típico del lado masculino: El está expresando su dolor de una forma privada y, a través de restaurar el Chevy, él está honrando la memoria de su padre. Cathy, sin embargo, se aflige de acuerdo a su lado femenino: Llorando y hablando con su familia y amigos.
"No importa que los hombres y las mujeres se aflijan de manera distinta," explica Golden. "Cada uno tiene un lado masculino y femenino. Generalmente, los hombres tienden a usar más su lado masculino y las mujeres el lado femenino."
Mientras que las mujeres expresan y comparten su pena y contemplan el pasado, la mayoría de los hombres no verbalizan su dolor y con frecuencia negarán que se encuentran tristes. Ellos también son más propensos a tomar acción, tales como crear una fundación o un monumento de conmemoración. "Lo importante aquí es que la actividad lo conecta con el dolor," dice Golden. "Si es así, entonces es un proceso de curación."
Los hombres son enseñados a ocultar sus lágrimas y reemplazar sus tristeza con ira . Durante la terapia, Golden dice que al principio los hombres están muy enojados, luego vienen las lágrimas. Con las mujeres, la situación es al revés: Primero vienen las lágrimas, luego la ira. "Las mujeres se avergüenzan de su ira," explica Golden, "de tal forma que ellas usan la fuerza de sus lágrimas; los hombres usan la fuerza de su ira para pasar a la de sus lágrimas."
Algunas veces la ira puede ser poco saludable. Un hombre desprendió el fregadero de la cocina de su esposa ausente, dice el Dr. Frank Williams, director del Family Counseling Agency en Tucson, Arizona. Otro hombre, cuya esposa había muerto de cáncer, saqueó la iglesia porque él estaba enojado con Dios. Los hombres que experimentan una pena muy profunda tienen más probabilidades de cometer suicidio exitosamente mientras que las mujeres tienden a intentarlo pero fallan. Los estudios también muestran que los hombres y las mujeres actúan por el abuso de las drogas o el alcohol .
El problema más grande con la terapia, dice Golden, es que está "diseñada para ser efectiva con las mujeres." Hablar y expresar emociones es difícil para la mayoría de los hombres debido a que no está en su naturaleza el buscar ayuda. "Sólo cuando los hombres alcanzan una crisis es cuando buscan ayuda," dice el Dr. Williams.
"Si usted realmente quiere ayudar a un hombre para que hable," dice Golden. "haga que él se involucre en una actividad." Una hostería invita a todos los viudos recientes a un viaje de pesca de todo un día. Esta actividad les permite a los hombres procesar su propia pena mientras pescan juntos. Este enfoque también funciona con niños. Los niños no se abrirán uno a otro pero hablarán mientras juegan baloncesto.
Cuando los hombres buscan asesoría, el Dr. Williams les pide que le cuenten su historia: "Dígame como fue el último día con su esposa." Mientras que las mujeres casi siempre llorarán, los hombres generalmente no lo hacen, al menos inicialmente. "Los hombres cuentan historias acerca de sus sentimientos en vez de expresarlos; las mujeres son más propensas a expresarlos [directamente]," dice.
Una vez que los hombres empiezan a hablar, ellos están más dispuesto que las mujeres para expresar ira. "Muchas veces ellos expresan un grado más alto de culpa - de que ellos debieron ser capaces de hacer algo sobre la situación," dice Williams. La idea de que ellos debieron ser capaces de controlar las circunstancias es típica de los hombres, mientras que las mujeres generalmente piensan que ellas no pueden, así que están más abiertas a recibir ayuda.
Un ritual es una actividad rutinaria que ayuda a las personas a cambiarse de un estado mental a otro. Esto con frecuencia es una parte crítica del proceso de curación de los hombres. Para Rick, esto fue restaurar el viejo Chevy. "La actividad ritual tiene por objeto conectarlo con su dolor y pena y permitirle retirarse de su conciencia ordinaria dentro de la experiencia de dolor, de una forma segura por un periodo de tiempo," explica Golden.
Algunas veces los hombres expresan su pena de una forma simbólica. Cuando el jugador de golf Payne Steward murió en un accidente de avión antes del Tournament of Champions, muchos de sus colegas usaron "knickers" (los favoritos de Payne) durante el evento. "Esto fue su manera de expresarnos que estaban sintiendo algo que no podían expresar," dice el Dr. Williams. Otras acciones simbólicas pueden incluir dedicar un juego durante un evento deportivo o construir un monumento de conmemoración.
Los hombres con frecuencia mezclan señales cuando se trata de expresar pena. El mensaje que ellos reciben al crecer es tomar la pérdidas "como un hombre." Sine mbargo, cuando alcanzan la edad adulta, los mensajes llegan a ser contradictorios. Golden ve las familias que experimentan dolor en donde la esposa y los niños están llorando, pero no el esposo. La familia se preocupa debido a que papá no está llorando. Aún si él lo hace, ellos se alteran. Aunque una esposa puede aliviarse de que su pareja sea capaz de dolerse, ella puede tener temor de que sus lágrimas de alguna manera disminuyan la fuerza incondicional que ella sabe que él mantiene. Por eso, los hombres son criticados cuando no se lamentan y su masculinidad es cuestionada cuando lo hacen.
Las diferencias biológicas también ofrecen cierta aproximación al por qué los hombres se lamentan de la manera en que lo hacen. Comparados con las mujeres, los hombres tienen menos prolactina, una hormona excretada por la glándula pituitaria, la cual está asociada con las lágrimas emocionales. Los niños y las niñas tienen cantidades iguales hasta la edad de 12 años, entonces el nivel de los niños empieza a bajar en la misma relación en que los niveles de testosterona se elevan.
En el cerebro, el corpus callosum (la banda entre los dos hemisferios) es un vínculo entre las emociones y las palabras. En los hombres, la conexión parece disminuir, lo cual significa que a los hombres les toma más tiempo procesar sus emociones. "Esto es como si los hombres fueran un procesador Intel 286 y la mujeres un Pentium 3," explica Golden. "No hay nada malo con un 286, sólo que es más lento."
A pesar de que hablar de que los hombres deben "mantenerse en contacto" con sus emociones, "Todavía estamos en la agonía de los seis millones de años de evolución y hormonas," dice Goden. "Es increíble la manera tan rápida en la que estamos cambiando." Una vez que los hombres y las mujeres entiendan que la mezcla de sus lados masculinos y femeninos trabajan en su proceso de dolor, tal vez estén más dispuestos a permitir a las personas en sus vidas que se lamenten de acuerdo a sus propias formas.
Fuentes Adicionales de Información
Crisis, Grief & Healing
Sitio web de Golden
www.webhealing.com
Último revisado Enero del 2000 por EBSCO Publishing's Medical Review Board
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