Los franceses parecen tener de todo - cultura, sentido de la moda, excelente comida, incluso corazones saludables. La última de estas cualidades envidiables plantea lo que se ha conocido como la Paradoja Francesa: ¿cómo pueden los franceses mantener una salud cardiovascular relativamente buena mientras consumen tantas grasas? La respuesta, en años recientes, han apuntado hacia su relativamente alto consumo de vino tinto.
Los estudios epidemiológicos sugieren que el consumo moderado de vino tinto reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular. Otros estudios han hecho la conexión entre los componentes de la cáscara de las uvas (las cuales son conservadas en el vino tinto) y la prevención de la oxidación (un paso importante en el desarrollo de la aterosclerosis) y el mejoramiento de la función vascular.
Pero muchas preguntas han quedado sin respuesta. Por ejemplo, ¿los otros tipos de alcohol también confieren beneficios cardiovasculares? ¿Importa con qué frecuencia toma usted, qué tanto toma o si toma con alimentos?
Los científicos se refirieron a esta cuestión en un artículo publicado el 9 de enero del 2003 en el New England Journal of Medicine . Ellos descubrieron que los hombres que consumían alcohol al menos por tres o cuatro días a la semana disfrutaban de una disminución más grande en el riesgo de enfermedad cardiaca que los hombres que bebieron sólo una o dos veces por semana, o que no bebieron en absoluto. Ellos también encontraron que la cantidad de alcohol consumida no fue del todo importante y - poniendo la Paradoja Francesa en entredicho - que la cerveza, el licor y el vino blanco parecían justo tan efectivos en la reducción del riesgo de enfermedad cardiaca como el vino tinto.
Los científicos analizaron datos de 38,077 hombres matriculados en el Health Professionals Follow-up Study. Los participantes, con edades entre los 40 a 75 años cuando comenzó el estudio en 1986, llenaron cuestionarios en relación a la dieta y su antecedente médico al inicio del estudio. Ellos respondieron preguntas sobre su consumo de cerveza, vino tinto, vino blanco y licor cada cuatro años. Los investigadores siguieron la pista de los ataques cardiacos fatales y no fatales en este grupo de 1986 hasta 1998.
Los hombres fueron excluidos de este estudio si estos habían tenido antecedente de ciertas enfemedades médicas incluyendo ataque cardiaco , angina , apoplejía y ataque isquémico transitorio , o si ellos habían dejado de tomar en los pasados diez años.
Comparados con los hombres que consumieron alcohol menos de una vez por semana, los hombres que consumieron alcohol tres o más veces por semana fueron 32% menos propensos a tener un ataque cardiaco y los hombres que bebieron de cinco a siete días por semana fueron 37% menos propensos a tener un ataque cardiaco. La reducción del riesgo fue similar para ataques cardiacos fatales y no fatales.
La cantidad de alcohol consumida por día, en promedio, tuvo muy poco impacto en el riesgo de ataque cardiaco, con un consumo promedio diario de 5.0 gramos de alcohol (alrededor de ½ botella de cerveza, ½ vaso de vino, o 1/3 de un copa de licor) teniendo casi el mismo impacto sobre el riesgo de enfermedad cardiaca como un promedio de ingesta diaria de 30 gramos de alcohol (cerca de 3 botellas de cerveza, tres vasos de vino o dos copas de licor).
La elección de bebida - cerveza, vino tinto, vino blanco o licor - casi no hizo ninguna diferencia. Ni tampoco pareció importar si el alcohol fue consumido con alimentos o por si solo.
Este estudio sugiere que la frecuencia del consumo de alcohol es un factor más importante en la reducción del riesgo de enfermedad cardiaca en los hombres que la cantidad o el tipo de alcohol consumido. Esto también es el caso para la ingesta de bebida de leve a moderada, con muy poco beneficio adicional encontrado en beber más de una copa cada dos días.
No esta claro si los descubrimientos también aplican a las mujeres. Mientras que es cierto que otros estudios han sugerido un efecto favorable en la ingesta moderada en mujeres, también es cierto que las mujeres procesan el alcohol de manera distinta que los hombres.
Si usted ya bebe de manera responsable, estos descubrimientos sugieren que su riesgo de ataque cardiaco estará disminuido si usted toma la bebida alcohólica de su elección tres o cuatro veces por semana. Sin embargo, si usted no toma en absoluto, este estudio no proporciona justificación para que empiece. Primero, el estudio es incapaz de determinar por qué el consumo regular de alcohol disminuye el riesgo cardiovascular. No podría ser el alcohol por completo, sino algunas otras características de los bebedores moderados que los investigadores no anticiparon. Segundo, y más importante, incluso una ingesta mínima, a algunas personas, puede llevarlas a un patrón de consumo excesivo o borracheras, lo cual puede tener resultados catastróficos. Los bebedores abundantes tienen un incremento en el riesgo de enfermedad cardiaca coronaria junto con índices más altos de depresión , ciertos cánceres, enfermedad hepática y accidentes automovilísticos.
FUENTES ADICIONALES DE INFORMACIÓN:
American Heart Association
http://www.americanheart.org
National Heart, Lung, and Blood Institute
National Institutes of Health
http://www.nhlbi.nih.gov
Fuentes:
Goldberg IJ. To drink or not to drink? [Editorial.] NEJM . 2003;348:163-164.
Mukamal KJ, Conigrave KM, et al. Roles of drinking pattern and type of alcohol consumed in coronary heart disease in men. NEJM . 2003;348:109-118.
Último revisado Ene 10, 2003 por Richard Glickman-Simon, MD
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