?Beber Leche para Estar Delgado?

Nueva Investigación Sobre Productos Lácteos y Peso

En el número de agosto del 2004 de la Journal of Nutrition , los investigadores en la University of Hawaii reportaron en un estudio que analizaron cómo el consumo de productos lácteos y refrescos afectó el peso y grasa corporal entre un grupo de mujeres adolescentes asiáticas y caucásicas.

Las adolescentes tenían entre 9 y 14 años de edad y, consumieron cerca de una y media porciones de productos lácteos al día - muy por debajo de las tres porciones diarias recomendadas . La mayoría de los productos lácteos consumidos fueron en forma de leche. Las adolescentes que bebieron refresco promediaron una botella grande (22 onzas) al día.

Los autores encontraron que algunas de las adolescentes que bebieron leche en vez de refresco tendieron a pesar menos y a tener niveles menores de grasa corporal, pero esta asociación sólo fue notada en las adolescentes asiáticas, quienes en promedio ya eran muy delgadas. No obstante, entre más leche bebieron, mayor el efecto en su peso. En contraste, las adolescentes que bebieron grandes cantidades de refresco tendieron a ser más pesadas y a tener más grasa corporal.

Estos resultados se unen a estudios previos que han mostrado resultados similares entre grupos de otras edades. Cuando factores como la edad, el nivel de actividad y el total de calorías consumidas se mantienen de forma estable, más y más estudios están indicando que los niños y los adultos que consumen más productos lácteos y calcio tienden a tener un peso corporal menor que aquellos en los grupos de comparación. Mantener altos los niveles de calcio también parece ayudar a que las personas que llevan dietas pierdan peso más rápidamente.

Más Adolescentes Tienen Sobrepeso

¿Es posible que algo tan simple como beber más leche pueda ayudar a controlar el peso? De ser así, las noticias son particularmente emocionantes dado el número de adolescentes que están luchando por perder peso. En los últimos diez años, la proporción de adolescentes que tienen sobrepeso se ha incrementado aproximadamente de uno de cada diez a uno de cada siete. La falta de ejercicio y los malos hábitos alimenticios - incluyendo el beber refresco en vez de leche - son dos de los principales culpables de esta tendencia. A partir de la década de 1960, el consumo de leche por parte de los adolescentes ha disminuido en un 36%, mientras que el consumo de refrescos y jugos se ha duplicado. Mientras que muchos adolescentes pueden reducir la leche porque ellos creen que ésta engorda, esta investigación puede sugerir que la leche hace justamente lo opuesto.

¿Cómo el Calcio Ayuda a Regular el Peso?

La investigación actual indica que el calcio desempeña una función importante en la regulación del peso al provocar cambios en el metabolismo de la grasa. Cuando ratones fueron alimentados con dietas altas en calorías, aquellos que también fueron alimentados con altos niveles de calcio no aumentaron tanto peso como los otros. Cuando las calorías fueron restringidas, los ratones con una dieta alta en calcio perdieron peso más rápidamente. El mismo patrón también ha sido visto en estudios humanos. Los altos niveles de calcio parecen inhibir la creación de depósitos de grasa en el cuerpo e incrementar el índice al cual la grasa es quemada.

¿Qué Es Más Efectivo: Lácteos o Calcio?

Parece que consumir productos lácteos puede ser más efectivo para regular el peso que consumir el calcio solo en forma de complementos de calcio (por ejemplo, calcio en píldoras de vitaminas, bloques de calcio). Los componentes en los productos lácteos - en particular las proteínas en el suero de leche - pueden actuar juntas con el calcio para tener un impacto en el metabolismo. O tal vez, las fuentes no lácteas de calcio (por ejemplo, los complementos) de las dietas de las personas estudiadas han sido una porción demasiado pequeña como para causar un impacto significativo. El tipo de lácteo consumido no parece importar, aunque la leche es el producto lácteo más popular entre los adolescentes.

No es una "Bala Mágica"

Desde luego, el factor más importante para controlar su peso es balancear el número de calorías que usted come con el número de calorías usadas. Los investigadores estiman que las diferencias en la ingesta de calcio representan sólo cerca del 3 al 10% en las diferencias de peso. La conclusión es que si usted simplemente añade más lácteos o calcio a su dieta, probablemente aumentará de peso. Pero si usted sustituye un vaso de leche baja en grasas (105 calorías por ocho onzas) por el refresco que normalmente toma en el almuerzo (también de aproximadamente 105 calorías por ocho onzas), puede encontrar que gradualmente pierde algunas de las libras adicionales que tiene. Incrementar el consumo de calcio puede ayudar a la gente a quemar el exceso de grasa, particularmente la grasa acumulada en el vientre, mientras que éste deja los músculos intactos.

Se Necesita Más Investigación

Aunque existe cúmulo creciente de investigación que muestra una relación entre la ingesta de calcio y el control de peso, pocos estudios no han encontrado asociación entre los dos. Algo de esta inconsistencia puede estar basada en qué tan difícil puede ser medir de forma exacta la ingesta alimenticia de una persona. Además, muchos de los estudios que fueron usados para establecer la conexión entre la ingesta de lácteos y el peso, originalmente fueron diseñados para otros propósitos, incluyendo estudiar el impacto del consumo del calcio en la densidad ósea, presión arterial alta y cáncer. Con la finalidad de establecer Firmemente el vínculo, se necesita investigación adicional dirigida específicamente a medir el impacto de los lácteos sobre el peso.

Mientras tanto, no puede ser perjudicial alentar a sus adolescentes a sustituir un vaso de leche por el refresco, o una taza de yogur por una galleta. La mayoría de los adolescentes consumen mucho menos lácteos de lo que es recomendado. Incrementar su consumo de lácteos debe tener muchos beneficios, incluyendo, si la investigación es correcta, ayudarlos a mantener un peso corporal saludable.