En sus propias palabras: Viviendo con herpes

A sus 81 años de edad, James está disfrutando de su vida de jubilado. Él vive en California, donde pasa su tiempo siendo abuelo, navegando en la red, y disfrutando el hermoso clima. Ha estado viviendo con herpes y su complicación, neuralgia postherpética, durante más de 20 años. Aunque puede ser bastante doloroso, él no permite que ello reduzca su actividad.

¿Cuál fue la primera señal de que algo andaba mal? ¿Cuáles síntomas experimentó?

Empezó en la piel sobre mi ceja derecha. Al principio sentí mucha comezón. Después, avanzó a una sensación de ardor u hormigueo. Después de aproximadamente uno o dos días, se convirtió en sarpullido. ¡Picaba con demasiada furia! El sarpullido empezó en mi ceja derecha (el cual es un lugar muy poco usual para el herpes) y se extendió a mi frente y sobre la parte de arriba de mi cabeza. Realmente fue muy doloroso. ¡Y tampoco se veía muy bien!

¿Cómo fue la experiencia del diagnóstico?

Bueno, el sarpullido no desaparecía. Y creo que mi esposa se cansó de mis dolencias, así que ella misma me llevó al consultorio del médico. El médico me observó y dijo, "¡Herpes!" y me envió con un oftalmólogo para asegurar que el ojo no hubiera sido afectado. Afortunadamente no lo fue. El médico recetó algunos medicamentos y me envió de regreso.

¿Cuál fue su reacción inicial y a largo plazo ante el diagnóstico?

Al principio estuve muy frustrado y enfadado. Usted no puede curar el herpes - es provocado por un virus que vive en nuestro cuerpo. Pensé, "no puedo creer que voy a tener que lidiar con esto por el resto de mi vida". Pero con el tiempo me he acostumbrado a él - uno aprende a sobrellevarlo.

Sin embargo, en ocasiones ha sido difícil, debido a que desarrollé neuralgia postherpética, que es una complicación del herpes. Esto significa que aún cuando no tenga un brote en un área, aún puedo sentir el dolor y comezón. Algunas veces puede ser bastante severo y durar por períodos variantes de tiempo, desde unos cuantos minutos hasta varias horas. Pero el gran consuelo es que hay personas que padecen enfermedades mucho peores que ésta.

¿Cómo se trata el herpes?

Como dije, usted no puede curar el herpes. El tratamiento sólo intenta ayudarle a pasar por un brote. El médico recetó aciclovir, que es un combatiente de virus y se toma oralmente. Desafortunadamente, funciona mejor cuando se toma antes de que los síntomas se presenten. No siempre estoy tan atento, especialmente porque algunas áreas me dolerán y me picarán sin pasar por un brote. Para ayudar con la comezón intento con todo lo que pueda ayudar a aliviar la comezón - algo como loción de calamina.

¿Tuvo que hacer cambios alimenticios o en su estilo de vida en respuesta al herpes?

No, realmente no. No he cambiado en absoluto mi dieta. Pero he tratado de encontrar más pasatiempos y algo que hacer con mi tiempo para no pensar en la enfermedad. Si el dolor se repite durante horas en que estoy despierto, simplemente trato de hacer algo para ocupar mi mente. Si puedo distraerme lo suficiente, generalmente el dolor desaparecerá sin medicamento. Si el dolor me despierta durante la noche, normalmente tomo algo para ello y trato de volver a dormir.

¿Buscó algún tipo de apoyo emocional?

Bien, al principio para lidiar con el dolor, probablemente tomé más de lo debido. Y mis amigos y familiares se compadecieron muy poco de mi sufrimiento. Es difícil para las personas entender que un sarpullido pueda provocar tanto dolor - ¡especialmente cuando no está ahí!

¿El herpes tiene algún impacto sobre su familia?

Ya no. Al principio, yo era muy dífícil debido al dolor. Pero ahora que me he acostumbrado a él y sé qué esperar, creo que es muy fácil vivir conmigo.

¿Qué consejo le daría a alguien que vive con herpes?

Usted sólo tiene que aprender a sobrellevarlo. El herpes no desaparece. Así que lo mejor que puede hacer es aprender a sobrellevar un brote. El estrés realmente puede provocar un brote, así que trate de evitarlo. Jubílese, si puede. Eso me ayudó.