Para la mayoría de las personas, la varicela generalmente es poco severa y no requiere de intervención, aparte de medidas para la comodidad. Los tratamientos para mejorar la comodidad incluyen:

Para Reducir la Comezón Ocasionada por el Sarpullido:

  • Con frecuencia se administran antihistamínicos (jarabe o cápsulas de difenhidramina) para reducir la sensación de comezón. Muchas veces éstos pueden causar somnolencia.
  • Las compresas húmedas y tibias pueden ayudar.
  • Los baños tibios de Aveeno (avena coloidal) o baños de carbonato podrían ofrecer algo de alivio.
  • La loción de calamina se usa comúnmente, pero no se ha comprobado su efectividad.

Para Evitar Infecciones Ocasionadas por el Sarpullido:

  • Evite rascarse tanto como le sea posible.
  • Mantenga sus uñas cortas.
  • Unos guantes o manoplas pueden ser especialmente útiles para los niños pequeños.

Cuándo Contactar a Su Proveedor de Servicios de Salud

Contacte a su médico o a otro profesional médico inmediatamente si ocurren complicaciones severas. Los síntomas serios asociados con la varicela y que quizás requieran de atención médica inmediata incluyen:

  • Sarpullido similar al pus (lo que puede indicar una infección bacteriana secundaria)
  • Úlceras en los ojos
  • Fiebre elevada
  • Dolor de cabeza severo
  • Confusión o letargo inusual
  • Vómito persistente
  • Dificultades para respirar o tos severa
  • Dolor en el pecho