image for food allergy article El término alergia alimentaria con frecuencia se aplica mal, causando que muchas personas crean que son "alérgicas" a ciertos alimentos cuando un término más preciso sería "intolerancia alimentaria". De hecho, los síntomas de la alergia alimenticia son causados ya sea por una reacción de hipersensibilidad o por una simple intolerancia alimentaria a componentes específicos de una comida. Los síntomas de reacciones adversas a un alimento van desde un simple sarpullido hasta la mortal anafilaxis . El identificar y evitar cualquier alimento que desencadene una reacción es la única "cura" disponible a la alergia alimentaria.

The American Academy of Allergy and Immunology reporta que 30% de los adultos creen que son alérgicos a ciertos alimentos. Sin embargo, los estudios han mostrados que una verdadera alergia alimentaria es en realidad algo bastante raro, que afecta a menos del 2% de la población. Parte de la confusión se debe a la definición de alergia alimentaria.

¿Qué Es una Alergia Alimentaria?

Desafortunadamente no existe una definición precisa para el término de alergia alimentaria. En su lugar, los profesionales médicos utilizan el término hipersensibilidad alimentaria . Esto se refiere a una específica reacción alérgica que involucra al sistema inmune, es desencadenado por un alimento en particular y es reproducible. En otras palabras, los mismos síntomas, por ejemplo, la sibilancia o un sarpullido, pueden ocurrir cada vez que se come este alimento.

La intolerancia alimentaria, la cual se estima que ocurre en aproximadamente el 16% de la población, es una reacción adversa a una comida que no involucra al sistema inmune. La intolerancia alimentaria puede ser inconsistente; las reacciones al alimento sospechoso pueden variar en severidad con cada exposición, o quizás no ocurra en absoluto.

¿Qué Causa una Reacción de Hipersensibilidad Alimentaria?

La hipersensibilidad alimentaria es desencadenada por los alergenos, componentes alimenticios (usualmente proteínas) que reaccionan con el sistema inmune. Muchos alergenos diferentes pueden estar presentes en un mismo alimento. Leche de vaca, huevos, mariscos (camarones, cangrejo o langosta); nueces (cacahuates, nuez moscada, nuez de la India, nueces de Brasil); legumbres (chícharos, lentejas, frijoles lima); maíz; soya; y el trigo, todos estos son los alergenos que con mayor probabilidad desencadenarán reacciones de hipersensibilidad alimentaria.

La hipersensibilidad alimentaria, especialmente a la leche de vaca, se ve con más frecuencia en niños (aproximadamente en un 5%) que en adultos (menos de un 2%). Muchos niños desarrollan hipersensibilidad alimentaria en los años posteriores, con sensibilidad a la leche, al huevo y a la soya que son a lo que probablemente se reaccione con el paso del tiempo. Sin embargo, las personas que son sensibles al pescado o a las nueces probablemente tendrán que evitar estos alimentos para siempre.

Porqué Ocurren las Reacciones

Las personas que son "alérgicas" a ciertos alimentos simplemente son más sensibles a los alergenos que se encuentran en estos alimentos. Las reacciones alérgicas a los alimentos resultan de las acciones de un grupo específico de proteínas llamadas anticuerpos . Los anticuerpos, una parte importantes del sistema de defensa del cuerpo, se activan cuando se come un alimento que es agresor. Su rol es reconocer a los invasores extraños (antigenos) en este caso, a los alergenos, y deshacerse de ellos.

Ciertos tipos de anticuerpos, conocidos como IgE, reaccionan con más fuerza, y quizás sean más abundantes en personas con hipersensibilidad alimentaria.

Cuando los anticuerpos IgE se encuentran con un alérgeno alimentario al cual son sensibles, se adhieren a las proteínas del alimento. Esta adhesión ocasiona que el sistema inmune libere mediadores, mensajeros químicos que viajan a lo largo del torrente sanguíneo para alertar a otros órganos sobre la presencia de una proteína huésped que no es bienvenida.

La liberación de estos mediadores ocasiona los incómodos, u ocasionalmente peligrosos, síntomas de una reacción alérgica. La extensión de la reacción depende de la cantidad de alimento consumido, la edad y el estado de salud y la ruta adoptada por los mediadores. Los tres sitios más comunes de una reacción incluyen:

Piel

Los síntomas de una reacción alérgica en la piel incluyen sarpullido, urticaria (ronchas abultadas, enrojecidas y dan comezón extrema, también conocidas como urticaria ) y angioedema , la cual es una inflamación de la piel que resulta de la secreción de un líquido en el tejido. El angioedema afecta a la piel y a los tejidos mucosos del rostro, de los labios y de la garganta, laringe, extremidades y de los genitales. La comezón y el eczema (un sarpullido cutáneo que da comezón y se descama) también son comunes pero usualmente ocurren varios días después de que la comida ofensiva es ingerida. La urticaria y el angioedema son las reacciones inmediatas más comunes, típicamente dentro de un lapso de minutos (a veces segundos) después de la ingestión del alimento.

Tracto Gastrointestinal

Los mediadores que viajan al tracto GI pueden ocasionar síntomas a lo largo de toda su trayectoria: inflamación en los labios, comezón en la boca o en la garganta, náusea y vómito, calambres e inflamación, distensión abdominal o dolor abdominal intenso y diarrea .

Tracto Respiratorio

Los síntomas que afectan a la respiración pueden incluir asma , rinitis (catarro o una nariz congestionada e inflamada), sibilancia o dificultad para respirar.

Shock Anafiláctico

Un shock anafiláctico es un tipo de reacción alérgica extremadamente severa y mortal. Los síntomas ocurren en una rápida sucesión, progresando de comezón en la garganta o que ésta se inflame a dificultad para respirar, hipotensión y pérdida de la conciencia o incluso la muerte, si no se aplica el tratamiento adecuado inmediatamente.

Las alergias alimentarias de todo tipo, pero particularmente aquellas que involucran a la piel y al tracto respiratorio, pueden ser tanto inmediatas, ocurriendo en cuestión de minutos, o bien retrasarse por horas o incluso por días después de que se consumió el alimento. En algunos individuos extremadamente sensibles, la simple liberación de las proteínas del alimento en el aire (como ocurre, por ejemplo, con una bolsa abierta de cacahuates) puede provocar el inicio de los síntomas.

Intolerancia Alimentaria

Las reacciones adversas al alimento que ocurren fuera del sistema inmune se definen como intolerancias alimentarias. Distinguir entre la intolerancia alimentaria y la hipersensibilidad alimentaria con frecuencia es difícil para una determinada persona, debido a que los síntomas son bastante similares. Las intolerancias alimentarias pueden atribuirse a una cantidad de causas diferentes, incluyendo:

  • Aditivos químicos incluyendo el aspartamo, diluyentes, nitratos, MSG, sulfatos y la tartrazina
  • Las causas o reacciones farmacológicas a sustancias que naturalmente están en los alimentos y con sustancias similares a las drogas como la cafeína, los alcaloides (encontrados en los hongos) o goitrógenos (en las coles)
  • Deficiencia de enzimas, como la intolerancia a la lactosa (la incapacidad de producir la enzima lactasa, la cual digiere la azúcar lactosa de la leche)
  • Trastornos psicológicos, como aversión a la comida
  • Idiosincrática, que significa "causa desconocida"

Tratando la Hipersensibilidad Alimentaria

Deben realizarse pruebas de diagnóstico para determinar si está presente una verdadera alergia alimentaria. Éstas pueden incluir:

  • Prueba de escarificación : Extractos de los antígenos alimentarios sospechosos se colocan en la piel en un área que se pinchó o raspó para que penetre la gota. Un resultado "positivo" (un abultamiento) prueba que las células inmunes de la piel están reaccionando al antígeno.
  • Prueba de inmuno análisis de radioalergoadsorción (RAST) y prueba de inmuno análisis de enzima fluorescente (FEIA) : Esta prueba de sangre indica la presencia de IgE, el anticuerpo más activo en las reacciones de hipersensibiliad alimentaria. La prueba puede ayudar a identificar cuáles alimentos evitar al cotejar antígenos alimentarios específicos y anticuerpos IgE.
  • Prueba de provocación : El paciente es alimentado con las comidas sospechosas bajo condiciones cuidadosamente controladas y cualquier reacción es anotada. Esta prueba es peligrosa porque se pone al paciente en riesgo de un shock anafiláctico.

Opciones de Tratamiento

Generalmente, el modificar la alimentación es el método habitual para tratar la hipersensibilidad alimentaria. Se le pide al paciente que mantenga una dieta alimenticia por 1-2 semanas, escribiendo todos los alimentos que come y notando cualquier reacción. Después se elimina cualquier alimento sospechoso para ver si los síntomas desaparecen. Una eliminación en la dieta puede volverse muy limitada, así que debe prepararse la ayuda de un dietista registrado (RD). Este le puede explicar la dieta y asegurarle que se está cumpliendo con los requisitos de nutrición.

No existen curas para la hipersensibilidad alimentaria. Aunque las inyecciones y medicamentos antiestamínicos contra las alergias funcionan para el polen y las alergias a las plantas, estos remedios no funcionan contra la hipersensibilidad o intolerancia alimentarias. La estricta omisión de los alimentos ofensivos es la única cura. Esto es un serio reto. ¡Imagine tener que preocuparse constantemente sobre el contenido de los platillos de los restaurantes o tener que leer cada palabra en la etiqueta de un alimento para determinar sus ingredientes!

Cuando ocurre una hipersensibilidad alimentaria, se puede requerir de un tratamiento agudo. En el caso de una anafilaxis, dicha acción quizás le salve la vida. Es necesaria la administración inmediata de epinefrina para detener la reacción. Generalmente se requiere de un posterior tratamiento en una sala de emergencia o en el consultorio médico. Esto quizás incluya antihistamínicos, cortisona o ambos.

Aunque una reacción anafiláctica inicial puede no ser severa, la segunda quizás sea fatal debido a que ocurre después de que el cuerpo ha tenido tiempo para producir anticuerpos específicos para combatir los alergenos alimentarios. Es necesario consultar con un alergólogo para determinar si usted está en riesgo de una reacción. La mayoría de las personas que han tenido reacciones anafilácticas significativas siempre deben portar un aparato de inyección automática, como un Epi-pen, que les permita tratar rápidamente los síntomas mientras esperan ser transportados a una sala de emergencia.

Las reacciones de la piel y las respiratorias quizás a veces se traten con antihistamínicos o con inhaladores pulmonares. Todas la reacciones de hipersensibilidad en las que haya inflamación en la boca o en la garganta deben ser evaluadas rápidamente por personal médico calificado para asegurarse de que la inflamación no esté progresando de manera que pudiera obstruir la respiración.

Los miembros de Food Allergy Network dicen que convencer a otras personas de que la hipersensibilidad alimentaria es real es uno de los problemas más difíciles a los que se enfrentan. Afortunadamente, se tienen disponibles fuentes de información y redes de apoyo para aquellos que tienen que lidiar con una alergia alimentaria.