Definición

Quemadura de sol es el término que se utiliza para describir la piel enrojecida, que en ocasiones se inflama y provoca dolor. Esta situación es causada por la sobreexposición a los rayos ultravioleta (UV) del sol. Los síntomas pueden variar de moderados a graves. El alcance depende del tipo de piel y del tiempo de exposición al sol. Una quemadura de sol es un factor de riesgo grave para el cáncer de piel y otros daños ocasionados por el sol.

Quemadura de Primer Grado (Quemadura Superficial)

Imagen informativa de Nucleus
© 2009 Nucleus Medical Art, Inc.

Causas

Una quemadura de sol es causada por la sobreexposición a los rayos UV del sol.

Factores de riesgo

Los factores que incrementan la probabilidad de sufrir quemaduras de sol son:

  • Exposición al sol
  • Piel clara
  • Ciertos medicamentos que pueden aumentar la sensibilidad al sol, como antibióticos, diuréticos o anticonceptivos orales
  • Ubicación geográfica: mayor incidencia en el sur de los Estados Unidos

Síntomas

Los síntomas de una quemadura de sol varían de persona a persona. Puede darse cuenta del enrojecimiento de la piel después de varias horas de que la quemadura se ha iniciado. El enrojecimiento máximo se alcanza 12 a 24 horas después.

Los síntomas incluyen:

  • Enrojecimiento
  • Hinchazón
  • Calor
  • Dolor
  • Ampollas
  • Fiebre
  • Escalofríos
  • Náuseas y vómitos en los casos graves
  • Debilidad
  • Síntomas de shock, incluyendo:
    • Baja presión arterial
    • Desmayo
    • Debilidad en extremo (en casos poco comunes y serios)

Diagnóstico

Una quemadura leve generalmente no requiere de una visita al médico. Sin embargo, si presenta alguno de los síntomas citados con anterioridad, consúltelo. El médico le preguntará acerca de sus síntomas y antecedentes clínicos. Se le realizará un examen físico. Para casos más graves de daños solares, se le podría recomendar que consulte a un médico especializado en desórdenes de la piel (dermatólogo).

Tratamiento

El tratamiento varía dependiendo de la gravedad de la quemadura. El primer paso del tratamiento, que es el más importante, implica interrumpir la exposición solar al observar el primer signo de enrojecimiento u hormigueo. No tome sol hasta que la piel haya sanado completamente. Este proceso puede llevar varias semanas.

Además, puede hacer lo siguiente:

  • Aplicar compresas de agua fría para aliviar la piel quemada.
  • Tomar antiinflamatorios de venta libre.
  • Tomar corticosteroides tópicos u orales, que ayudan a acortar la duración del dolor y la inflamación. Los esteroides tópicos pueden no aliviar el enrojecimiento de la piel.
  • Tomar antibióticos prescritos médicamente si se manifiesta una infección.
  • Tener especial cuidado para proteger la piel después de que se pele, ya que en ese momento la piel se encuentra muy sensible.

Prevención

Para prevenir una quemadura de sol, debe proteger su piel de los rayos solares.

  • Evitar la luz solar intensa y directa.
  • Planear actividades al aire libre a la mañana temprano o por la tarde para evitar las horas pico de luz solar, entre las 10:00 a. m. y las 4:00 p. m.
  • Elija un bloqueador, una pantalla solar o indumentaria especial para bloquear el sol con factor de protección solar (FPS) no inferior a 15. Debe filtrar los rayos UVA y UVB.
  • Aplicar el bloqueador amplia, completa y frecuentemente sobre toda la piel expuesta. No olvide de aplicarlo en los labios.
  • Usar ropa protectora ajustada así como también un sombrero de ala ancha y lentes para el sol.

Recordar que el agua no es un buen filtro y que se puede sufrir una quemadura de sol mientras nada o practica buceo. También puede sufrir una quemadura de sol durante el invierno y en días nublados o con neblina.