Si pudiera reducir su riesgo de cáncer de próstata ajustando su dieta, ¿lo haría? SI sabe que 179,000 nuevos casos de cáncer de próstata serían diagnosticados este año, y que 37,000 hombres morirán, ¿reconsideraría su respuesta? Hay evidencia en aumento de que la dieta está fuertemente relacionada con el cáncer de próstata - la segunda causa común de cáncer - mortal en los hombres estadounidenses.
Aunque las estadísticas suenan pesimistas, la buena noticia es que la dieta que come hoy puede en realidad retrasar o prevenir el desarrollo de cáncer de próstata en el camino. En Asia, por ejemplo, el porcentaje de hombres que desarrollan cáncer de próstata es mucho menor al de los Estados Unidos, y el cáncer de próstata que se desarrolla en los hombres asiáticos es más curable. Los investigadores han especulado mucho sobre ciertos aspectos de la dieta asiática que pueden ser protectores contra el cáncer de próstata. Y en ciertos países mediterráneos tal como en Grecia e Italia, la tasa de cáncer de próstata también es baja: Algunos especialistas especulan que la dieta también es un factor ahí.
Los compuestos llamados isoflavonas , encontrados principalmente en la soya, están presentes en la dieta asiática, pero están virtualmente ausentes en la dieta típica estadounidense. Los asiáticos comen la soya entera o derivados de la soya mínimamente procesados, tal como el tofu y la leche de soya.
Se estima que los hombres japoneses consumen hasta 200 mg de isoflavonas por día mientras que los hombres asiáticos consumen 25-45 mg. Los hombres estadounidenses, no obstante, típicamente consumen menos de 5 mg de isoflavonas al día.
Las isoflavonas pueden ejercer propiedades antitumores en una variedad de formas. Pueden jugar un papel en prohibir la formación de nuevos vasos sanguíneos que son necesarios para alimentar un cáncer creciente. Debido a que el cáncer de próstata es un cáncer dependiente hormonal, las isoflavonas pueden disminuir las hormonas que desencadenan el cáncer de próstata, teóricamente disminuyendo la probabilidad del crecimiento de cáncer.
Buenas fuentes de isoflavonas incluyen:
El té verde contiene componentes preventivos de cáncer llamados flavonoides, que actúan como antioxidantes. Varios estudios realizados en animales sugieren que un flavonoide particular, el epigalocatequina galata (EGCG, por sus siglas en inglés), puede tener la capacidad de detener la expansión de los tumores. Los investigadores japoneses han notado que el inicio del cáncer en pacientes que consumen 10 tazas de té verde por día parece ser de tres a ocho años después cuando se compara con la gente que consume tres o menos tazas de té verde. Los asiáticos típicos consumen un promedio de cinco tazas de té verde al día.
De acuerdo al Dr. Douglas Balentine de la compañía Lipton Tea, si el té verde se empina por sólo un minuto, el contenido promedio de flavonoides es de 208 mg. Si se empina por cuatro minutos, el contenido de flavonoides se incrementa a 300 mg.
Licopeno es parte de un grupo de compuestos llamados carotenoides que son conocidos por sus propiedades antioxidantes, que pueden incluir la capacidad de inhibir el cáncer. ¿Dónde puede encontrar licopeno? La sandía y la toronja rosa contienen licopeno, pero los alimentos basados en jitomate contienen la mayoría. Cuando se calientan los alimentos basados en jitomate y se mezclan con una pequeña cantidad de aceite, la absorción de licopeno es maximizada. Eso hace a los productos cocidos de jitomate excelentes fuentes de licopeno.
En un estudio reportado frecuente, el Dr. Edward Giovannucci del Harvard Medical School examinó las dietas de más de 47,000 hombre sobre un período de seis años. El notó una correlación entre el cáncer de próstata y una ingestión marginal de alimentos basados en jitomate, que contiene grandes cantidades de licopeno. Los hombres que tienen diez o más porciones por semana de alimentos basados en jitomate tenían una probabilidad 45 por ciento menor de desarrollar cáncer de próstata.
"El jurado aún está sobre el licopeno," dice el Dr. Collen Doyle, m.S., R.D., director de actividad nutricional y física de la American Cancer Society (ACS por sus siglas en inglés). "Los estudios preliminares no han mostrado consistentemente que los hombres que consumen más licopeno estén en un riesgo reducido de desarrollar cáncer de próstata."
No obstante, Doyle señala que los jitomates son aún una parte importante de una dieta saludable. "Todos deben comer al menos cinco porciones de una amplia variedad de frutas y verduras cada día y los jitomates son una gran forma de conseguir sus cinco prociones diarias de verduras," dice.
Un estudio reciente del Fred Hutchinson Center en Seatle confirma que todas las verduras pueden ayudar a reducir el riesgo de cáncer de próstata. De acuerdo a Alan Kristal, Dr, P.H., "comer muchas verduras puede acortar su riesgo de cáncer de próstata por alrededor de 45 por ciento. Y si estas verduras son de la familia frondosa, como el repollo y el brócoli, puede reducir su riesgo aún más."
Este estudio - que examinó los riesgos de cáncer de próstata en hombres más jóvenes (edades de 40 a 64) - observó las asociaciones entre el consumo global de frutas y verduras así como las frutas y verduras específicas y el riesgo de cáncer de próstata.
En el estudio, los hombres que comieron tres o más porciones por día de verduras tuvieron un riesgo de 48 por ciento menor de cáncer de próstata, comparados con los hombres que comieron menos de una porción al día. Esta asociación fue independiente de otros factores alimenticios (tal como la ingestión de grasas) y un historial de cáncer de próstata en el padre o hermano. La correlación más fuerte se notó con las verduras frondosas - brócoli, coliflor, repollo y col de Bruselas.
Se ha especulado que la ingestión alta típica en grasas en la dieta occidental puede acelerar el cáncer de próstata. Un estudio reciente en Sloan Kettering Institute for Cancer Research notó que los efectos antioxidantes de la vitamina E parecen detener el crecimiento del tumor de próstata en ratones, que fue inicialmente desencadenado por una dieta alta en grasas. La investigación continúa sugiriendo que 200-400 IU (unidades internacionales, por sus siglas en inglés) de vitamina E complementaria puede ser útil para los estadounidenses, así que este es un suplemento que puede ser benéfico tanto para la salud de próstata y la salud general.
El cáncer de próstata es un cáncer dependiente de hormonas. Cualquier aspecto de la dieta que ate hormonas podría tener un efecto positivo en la salud de la próstata. La fibra alimenticia , por ejemplo, puede retirar hormonas del sistema. Se ha encontrado que los hombres que comen más frutas, verduras y granos enteros - todas fuentes excelentes de fibra - han disminuido los niveles circulatorios de las hormonas masculinas. El National Cancer Institute recomienda consumir al menos 25 gramos de fibra por día. Una porción de 1/2 taza de frutas o verduras contiene alrededor de 2 gramos de fibra; una rebanada de pan integral 5 gramos; y una porción de 1/2 taza de cereal alto en fibra una sorprendente cantidad de 14 gramos.
Ningún alimento o suplemento puede protegerlo del cáncer de próstata, Una dieta que sea baja en grasas, contiene al menos cinco porciones por día de frutas y verduras, y la adición de productos basados en soya puede ser un camino largo en proteger su próstata. El mensaje más importante que uno debe tomar de una investigación de los beneficios potenciales de comer adecuadamente (teniendo frutas y verduras frescas) es que puede haber un beneficio en términos de reducir su riesgo de cáncer de próstata. No hay duda de que su corazón será más sano, y los padecimientos cardiacos estarán más lejanos con mayor probabilidad a acortar su vida prematuramente que el cáncer de próstata.
FUENTES ADICIONALES DE INFORMACION:
CaP Cure: Association for the Cure of Cancer of the Prostate
http://www.capcure.org
Lycopene.org
http://lycopene.org
Un sitio web dedicado a la información sobre licopeno.
U.S. Soyfoods Directory
http://soyfoods.com
Último revisado Noviembre 2004 por Kimberly Rask, MD, PhD
Se provee esta información como complemento a la atención proporcionada por su medico. Dicha información no tiene el propósito o la presunción de substituir el consejo medico profesional. Procure siempre el consejo de su medico o de otro profesional de la salud competente antes de iniciar cualquier tratamiento nuevo o para aclarar cualquier duda que usted pueda tener con relación a un problema de salud.
Registro de propiedad literaria © EBSCO Publishing. Todos los derechos reservados.