Image for omega3 article En años recientes, usted probablemente ha escuchado a expertos de la salud pregonando los posibles beneficios cardiovasculares de comer más ácidos grasos omega 3; grasas encontradas en el pescado y algunos alimentos provenientes de plantas. Evidencia en aumento sugiere que los ácidos grasos omega 3 también podrían ser benéficos para la prevención y tratamiento de ciertos trastornos mentales, particularmente la depresión .

Ácidos Grasos Omega 3: De la Tierra y los Mares

Los ácidos grasos omega 3, un tipo de grasa poliinsaturada, se consideran "grasas buenas." Omega 3 se refiere a su estructura química. Existen tres formas de ácidos grasos omega 3: ácido docosahexaenoico (DHA), ácido eicosapentaenoico (EPA), y ácido alfa-linolénico (ALA).

Los siguientes alimentos contienen ácidos grasos omega 3:

  • Pescado graso, incluyendo:
    • Salmón
    • Pez caballa
    • Tuna
    • Arenque
    • Mero
  • Alimentos provenientes de plantas, como:
    • Linaza molida
    • Aceite de linaza
    • Aceite de canola
    • Aceite de soya
    • Nueces de Castilla
    • Verduras de hoja frondosa
    • Tofu

Muchos expertos de la salud creen que los ácidos grasos omega 3 podrían ser cruciales para el funcionamiento cerebral y que una deficiencia podría conducir o exacerbar enfermedades mentales en ciertas personas.

Investigadores "Pescan" Evidencia

Depresión

La depresión se ha vuelto cada vez más frecuente en la sociedad occidental. Algunos investigadores creen que esto podría ser, en parte, a causa de cambios dietéticos importantes que han ocurrido durante el último siglo, los cuales han dado como resultado un consumo reducido de ácidos grasos omega 3. Varios estudios sugieren que los ácidos grasos omega 3 podrían ser benéficos en el tratamiento de la depresión.

Niveles de Omega 3 en la Dieta y Membranas de Glóbulos Rojos en Pacientes Deprimidos

Un estudio publicado en Journal of Affective Disorders encontró bajos niveles de ácidos grasos poliinsaturados omega 3 en las membranas de los glóbulos rojos (RBC) de pacientes deprimidos, pero no en un grupo de control saludable bien compatible. El estudio también encontró que el incremento en la severidad de la depresión estaba relacionado con la reducción de niveles de membranas RBC de ácidos grasos omega 3, así como la reducción del consumo dietético de ácidos grasos omega 3.

Consumo de Pescado y Depresión

En un artículo de The Lancet , Dr. Joseph Hibbeln, un investigador en the National Institute on Alcohol Abuse and Alcohol Consumption, revisó información de nueve países y encontró una alta incidencia de depresión en países con bajo consumo de pescado. Él advirtió que varios factores económicos, sociales, culturales, y otros, podrían haber influido en los resultados del estudio. Sin embargo, estudios adicionales han encontrado que las altas concentraciones en plasma sanguíneo de ácido docosahexaenoico, un ácido graso omega 3 encontrado en el pescado, han estado relacionadas con una regeneración incrementada de serotonina e incidencias más bajas de depresión y suicidio.

Dietas Restringidas en Grasa y la Depresión

En la revista Nutrition Reviews , investigadores revisaron numerosos estudios que sugieren que podría haber una asociación entre las dietas extremadamente bajas en grasa, bajos niveles de colesterol, y un incremento en la incidencia de depresión.

En la revisión se incluyó una observación hecha por investigadores en the University of Arizona de que la restricción de grasa y los medicamentos reductores de colesterol podrían cambiar las concentraciones de ácidos grasos poliinsaturados en los tejidos, incluyendo el tejido nervioso. Las dietas restrictivas en grasa tienden a conducir a un consumo incrementado de ácidos grasos omega 6 poliinsaturados y una reducción relativa en el consumo de ácidos grasos omega 3. Para algunas personas, estos cambios podrían incrementar el riesgo de depresión.

La revisión incluyó otros estudios a gran escala que demostraron una clara asociación entre los bajos niveles sanguíneos de ácidos grasos omega 3 y un riesgo incrementado de depresión, violencia, y suicidio.

Los investigadores concluyeron que los ácidos grasos omega 3 son cruciales para el funcionamiento adecuado del sistema nervioso y que una dieta extremadamente baja en grasa podría conllevar a efectos psicológicos negativos en ciertas personas. Ellos hicieron hincapié en que el consejo alimenticio con respecto a la reducción de colesterol, pérdida de peso, y prevención de cáncer debería resaltar la importancia de un consumo adecuado de ácidos grasos omega 3.

Trastorno Bipolar

El trastorno bipolar , o enfermedad maniaco-depresiva, es un trastorno cerebral que causa cambios extremos en el estado de ánimo, energía, y capacidad para funcionar. Por lo general, el trastorno se trata con medicamentos estabilizadores del estado de ánimo como carbonato de litio o valproato. Sin embargo, estos medicamentos no siempre son muy efectivos y los índices de reaparición son altos.

Un estudio de Harvard, publicado en Archives of General Psychiatry , encontró que los ácidos grasos omega 3 eran efectivos en el tratamiento de trastorno bipolar cuando se tomaban con un medicamento convencional estabilizador del estado de ánimo. El estudio doble ciego, controlado con placebo, de cuatro meses de duración, comparó los ácidos grasos omega 3 del aceite de pescado (9.6 gramos al día) con un placebo (aceite de oliva) en 30 personas con trastorno bipolar. El estado mental de los participantes fue medido antes y después del tratamiento, usando the Clinical Global Impression Scale, Global Assessment Scale, Young Maria Rating Scale, y the Hamilton Rating Scale for Depression. Los resultados fueron de la siguiente manera:

  • Nueve de las 14 personas que recibieron ácidos grasos omega 3 tuvieron una reducción significativa de los síntomas, mientras que sólo 3 de las 16 personas que recibieron el placebo mostraron una reducción de los síntomas.
  • Ninguno de los participantes que tomó el aceite de pescado experimentó un empeoramiento de los síntomas durante el estudio, pero nueve de los participantes que tomaron el placebo experimentaron un empeoramiento de sus síntomas.
  • Aunque la mayoría de los participantes en el estudio estaban tomando estabilizadores del estado de ánimo, ocho recibieron medicamentos no concomitantes. De esos ocho, los cuatro participantes que recibieron el aceite de pescado terminaron el estudio sin episodios mayores de manía o depresión mientras que sólo uno de los participantes que tomaron el placebo sí lo hizo.

Los resultados parecieron prometedores para consumir aceite de pescado, junto con estabilizadores del estado de ánimo, en el tratamiento de trastorno bipolar. Sin embargo, Andrew Stoll, MD, investigador principal y profesor asistente de psiquiatría en Harvard Medical School, advierte contra el uso de aceite de pescado como un tratamiento de primera línea para el trastorno bipolar.

Esquizofrenia

La esquizofrenia es una seria enfermedad mental que con frecuencia se caracteriza por ilusiones, alucinaciones, bloqueo emocional, y retraimiento social.

Un estudio publicado en la revista Lipids encontró que el aceite de pescado, el cual contiene ácidos grasos omega 3, ayudó a reducir la severidad de los síntomas en un grupo de 24 pacientes con esquizofrenia. Aunque ninguno de estos pacientes tenía deficiencia clínica de consumo de ácidos grasos antes de la complementación, sus síntomas mejoraron después de recibir 10 gramos al día de aceite de pescado concentrado durante un periodo de seis semanas.

En 2003, otro estudio mostró que el ácido etil-eicosapentaenoico (E-EPA), un tipo de ácido graso omega 3, podría ser útil para reducir síntomas negativos de la esquizofrenia cuando se usa junto con medicamentos regulares de los pacientes.

Sin embargo, una revisión sistemática en el año 2006 de seis estudios (incluyendo el estudio antes mencionado del año 2003) concluyó que los resultados en general son inconsistentes. Se necesitan estudios grandes y bien diseñados para investigar más los posibles beneficios de este suplemento para tratar la esquizofrenia.

Trastorno de Personalidad Limítrofe

El trastorno de personalidad limítrofe es una enfermedad mental con frecuencia caracterizada por miedo al abandono, cambios en el estado de ánimo, comportamiento impulsivo, agresión, y auto-lesión. Un estudio reciente sugiere que los ácidos grasos omega 3 podrían ayudar a tratar los síntomas del trastorno de personalidad limítrofe.

El estudio, publicado en American Journal of Psychiatry , consistió de 30 mujeres que cumplieron con el criterio de diagnóstico para trastorno de personalidad limítrofe con base en the Structured Clinical Interview para trastornos DSM-IV Axis I y the Revised Diagnostic Interview for Borderlines.

Durante el periodo de estudio de 8 semanas, 20 de los 30 sujetos recibieron dos cápsulas de 500 mg de E-EPA. Los 10 participantes restantes recibieron un placebo de dos cápsulas diariamente que contenían aceite mineral.

Los investigadores evaluaron los niveles de depresión y agresión en los dos grupos al inicio y al final del estudio. Al final del estudio, los investigadores encontraron que aunque los niveles de depresión y de agresión descendieron en el grupo que tomó el placebo, éstos habían descendido aún más en el grupo que tomó ácidos grasos omega 3. Los investigadores concluyeron que el ácido graso omega 3 usado (E-EPA) podría ser una forma segura y efectiva de tratamiento para mujeres con trastorno de personalidad limítrofe moderadamente severo.

Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (ADHD)

Existe evidencia preliminar que sugiere que la deficiencia de ácidos grasos omega 3 podría ser responsable de los altos índices recientes de diagnóstico de ADHD entre niños. Hubo un estudio en Asia del Sur que examinó una combinación de aceite de pescado omega 3 y aceite de onagra (un aceite omega 6) en 132 niños con ADHD. Después que terminó el estudio de 30 semanas, casi la mitad de los padres reportaron que los síntomas de sus hijos habían mejorado.

El Futuro de los Ácidos Grasos Omega 3 y la Salud Mental

Se necesita investigación adicional para confirmar los beneficios de los ácidos grasos omega 3 y la salud mental. Sin embargo, algunos psiquiatras han empezado a recomendar que sus pacientes con trastornos del estado de ánimo consuman alimentos altos en ácidos grasos omega 3 o que tomen suplementos como aceite de pescado. Desafortunadamente, al menos un estudio aleatorio reciente y un estudio finlandés separado que trataron de correlacionar el consumo de omega 3 con la depresión, sugirieron que no hay relación entre el consumo (o el tratamiento) y la depresión.

Algunas Advertencias

Aunque es probable que la mayoría de personas puedan obtener beneficios para la salud por comer más pescado y ácidos grasos omega 3, independientemente si éstos mejoran la depresión, existen algunas cosas que hay que tener en mente:

  • Nunca use ácidos grasos omega 3 como un reemplazo para su medicamento psiquiátrico, a menos que su médico lo apruebe.
  • Los suplementos de aceite de pescado podrían causar efectos secundarios como indigestión, gases, y eructos con olor a pescado; sin embargo, es menos probable que esto sea un problema si usted comienza con una dosis baja y aumenta gradualmente.
  • En general, los suplementos de aceite de pescado son seguros. Sin embargo, existe una ligera posibilidad de sangrado incrementado. Por lo tanto, consulte a su médico antes de tomar suplementos de aceite de pescado, especialmente si usted planea someterse a cirugía.
  • Si usted toma suplementos de aceite de pescado, asegúrese que hayan sido despojados de exceso de vitaminas A y D, las cuales podrían ser tóxicas si se consumen en grandes cantidades.
  • Si usted está embarazada o en lactancia, evite el tiburón, pez espada, pez caballa gigante, atún, y pez azulejo debido a que éstos podrían estar contaminados con mercurio u otros contaminantes ambientales.
  • Incluso si no está embarazada, adquiera productos que hayan sido examinados para detectar contaminantes, como mercurio u otros metales pesados.