La ciguatera es una forma de envenenamiento humano causado por el consumo de peces vertebrados subtropicales y tropicales que han acumulado toxinas naturalmente a través de su dieta.
Generalmente las manifestaciones de ciguatera en humanos implica una combinación de trastornos gastrointestinales, neurológicos y cardiovasculares. Los síntomas definidos dentro de estas categorías generales varían con el origen geográfico del pescado tóxico. Los signos iniciales del envenenamiento ocurren a las seis horas del consumo del pescado tóxico e incluyen entumecimiento perioral y hormigueo (parestesia), que puede expandirse a las extremidades, náuseas, vómito y diarrea. Los signos neurológicos incluyen parestesia intensificada, artralgia, mialgia, dolor de cabeza, cambio total de temperatura sensorial y sensibilidad aguda a temperaturas extremas, vértigo y debilidad muscular al punto del agotamiento total. Los signos cardiovasculares incluyen arritmia, ritmo cardíaco disminuido o ritmo cardíaco rápido y presión arterial reducida.
Los procedimientos de pruebas clínicas actualmente no están disponibles para el diagnóstico de ciguatera en humanos. El diagnóstico se basa en la sintomatología e historial alimenticio reciente.
Los peces vertebrados marinos comúnmente implicados en el envenenamiento de pescado ciguatera incluyen los meros, barracudas, pargos, jacks, caballa y triggerfish. Muchas otras especies de peces de agua tibia abrigan toxinas de ciguatera. La ocurrencia de un pescado tóxico es esporádica y no todos los peces de una especie dada o de una localidad dada serán tóxicos.
La frecuencia relativa del envenenamiento de pescado ciguatera en los Estados Unidos no se conoce. La enfermedad sólo se ha vuelto conocida recientemente para la comunidad médica general. Hay una preocupación que la incidencia es escasamente reportada por la naturaleza no fatal y corta duración de la enfermedad.
Generalmente el envenenamiento ciguatera es autolimitante, y los signos de envenenamiento frecuentemente disminuyen a los pocos días del inicio. No obstante, en casos graves los síntomas neurológicos son conocidos por persistir desde semanas hasta meses. En pocos casos aislados los síntomas neurológicos han persistido por varios años. En otros casos, los pacientes recuperados han asociado la recurrencia de los síntomas neurológicos desde meses a años después de la recuperación. Tales recaídas son asociadas con mayor frecuencia con cambios en los hábitos alimenticios o con el consumo de alcohol. Hay baja incidencia de muerte resultado de insuficiencia cardiovascular y respiratoria.
Se cree que todos los humanos son susceptibles de las toxinas de ciguatera. Las poblaciones en las regiones tropicales/subtropicales son más probables de ser afectadas debido a la frecuencia de exposición a los peces tóxicos. No obstante, el rango geográfico de los envenenamientos humanos se ha expandido. Esto se debe al creciente consumo per cápita de productos de pescado junto con un incremento en el transporte interregional de productos de mariscos.
Fuente:
Food and Drug Administration
Se provee esta información como complemento a la atención proporcionada por su medico. Dicha información no tiene el propósito o la presunción de substituir el consejo medico profesional. Procure siempre el consejo de su medico o de otro profesional de la salud competente antes de iniciar cualquier tratamiento nuevo o para aclarar cualquier duda que usted pueda tener con relación a un problema de salud.
Registro de propiedad literaria © EBSCO Publishing. Todos los derechos reservados.