En los pasados 60 años, el número de muertes que ocurren por cáncer cervical ha disminuido a más del 70% en los Estados Unidos. Esta disminución drástica se atribuye al uso generalizado de exámenes de Papanicolaou (Pap) - exámenes de revisión para el cáncer cervical. Actualmente, más del 80% de mujeres se han practicado un examen de Papanicolaou en un lapso de los últimos tres años.

Los exámenes regulares de Papanicolaou ayudarán a detectar crecimientos precancerígenos o identificar cáncer cervical en sus etapas tempranas, cuando es sumamente tratable. Pero, ¿con qué frecuencia deben las mujeres practicarse exámenes de Papanicolaou? El consenso se inclina hacia una vez cada tres años. La U.S. Preventive Services Task Force y la American Cancer Society sugieren hasta intervalos de tres años entre las revisiones. Pese a estas recomendaciones, muchos médicos realizan exámenes de Papanicolaou anualmente.

Un estudio en el ejemplar del 16 de octubre de 2003 del New England Journal of Medicine encontró que extender el intervalo entre exámenes de Papanicolaou de uno a tres años aumentaría el riesgo de una mujer para desarrollar cáncer cervical aproximadamente a 3 de cada 100,000. Además, los investigadores calcularon que tomaría más de 42,000 exámenes de Papanicolaou y 2,300 exámenes colposcópicos (examinaciones cercanas del cuello uterino) para prevenir un caso adicional de cáncer cervical por medio de revisiones anuales.

Información sobre el Estudio

Los investigadores usaron datos del Centers for Disease Control and Prevention's (CDC) National Breast and Cervical Cancer Early Detection Program. De enero de 1991 a marzo de 2000, 938,576 mujeres menores de 65 años participaron en este programa, el cual proporcionó revisiones de cáncer cervical a mujeres de escasos recursos y aseguradas deficientemente.

Se revisó a las mujeres con exámenes de Papanicolaou. Las pruebas diagnosticas para detectar crecimientos precancerígenos o cáncer, con más frecuencia al usar un instrumento llamado colposcopio, se realizaron siguiendo resultados anormales de revisión.

En mujeres que tenían tres exámenes normales de Papanicolaou en sucesión, los investigadores determinaron el número excesivo de tipos de cáncer cervical que habrían ocurrido si las mujeres hubieran extendido el intervalo entre los exámenes de Papanicolaou de uno a tres años. Puesto que muy pocas mujeres desarrollarían cáncer, los investigadores han calculado el índice en el cual los crecimientos precancerígenos habrían evolucionado hacia el cáncer.

Los investigadores también calcularon el número de exámenes de Papanicolaou y procedimientos diagnósticos que tomaría para prevenir un caso adicional de cáncer anualmente por cada 100,000 mujeres revisadas.

Se dividió a las mujeres en grupos según su edad.

Los Hallazgos

Entre las 32,230 mujeres que tuvieron tres exámenes consecutivos negativos de Papanicolaou, los investigadores calcularon que extender el intervalo entre revisiones de uno a tres años tendría los siguientes efectos:

Grupo de edadCasos adicionales de cáncer por cada 100,000 mujeres
Menores de 30 años5
30-443
45-591
60-640

También determinaron que evitar sólo un caso adicional de cáncer por medio de revisión anual requeriría de lo siguiente:

Grupo de edadExámenes adicionales de PapanicolaouExámenes adicionales colposcópicos
Menores de 30 años42,6212,364
30-4469,6653,861
45-59209,32411,502

Estos cálculos no se pudieron realizar para mujeres de 60 a 64 años, puesto que extender el intervalo entre revisiones no tuvo efecto en el riesgo de cáncer cervical en este grupo.

¿De Qué Manera Le Afecta?

¿Superan las ventajas de la revisión anual a las desventajas? ¿Recordarán las mujeres asistir a las revisiones cada tres años en vez de cada año?

Puesto que el riesgo excesivo asociado con los intervalos de tres años entre exámenes de Papanicolaou era muy pequeño, estos resultados sugieren que las revisiones anuales pueden ser innecesarias en mujeres que han tenido tres exámenes normales de Papanicolaou en sucesión. El riesgo excesivo encontrado en este estudio es comparable con el riesgo de que un hombre de entre 45 y 64 años de edad desarrolle cáncer de mama. La revisión excesiva es costosa, aumentando el precio del cuidado de la salud. Además, la ansiedad y las dificultades asociadas con practicarse un examen de Papanicolaou cada año no es una cuestión sin importancia.

Sin embargo, es posible que extender el intervalo entre los exámenes de Papanicolaou cause que más mujeres omitan las revisiones. Extender el intervalo entre revisiones puede aumentar el riesgo de que las mujeres olviden programar una revisión o retrasar la práctica de un examen de Papanicolaou por más de tres años.

Así que, ¿con qué frecuencia debe practicarse exámenes de Papanicolaou? Usted y su médico deben tomar la decisión. Si se encuentra en un riesgo bajo de desarrollar cáncer cervical y ha tenido tres exámenes negativos de Papanicolaou, puede que sea capaz de extender el intervalo entre los exámenes de Papanicolaou a tres años. Sin embargo, si se encuentra en un riesgo mayor de desarrollar cáncer cervical o ya no asiste a revisiones regulares, su médico podría recomendarle realizarse un examen de Papanicolaou anualmente.

Los factores que aumentan su riesgo de desarrollar cáncer cervical incluyen:

  • Tener relaciones sexuales antes de los 18 años de edad
  • Tener parejas sexuales múltiples
  • Tener una pareja que inició sus relaciones sexuales a una edad temprana, tuvo muchas parejas sexuales o estuvo casado anteriormente con una mujer que tenía cáncer cervical
  • Haber sido diagnosticada con el virus del papiloma humano (HPV, por sus siglas en inglés) sexualmente transmisible
  • Tener una pareja que ha sido diagnosticada con HPV
  • Fumar
  • El SIDA y otras causas de un sistema inmunológico debilitado

Tenga en cuenta que los exámenes de Papanicolaou sólo son parte de una visita femenina oportuna con su ginecólogo, que también consiste en revisiones de cáncer de mama o de otro tipo, así como discutir una amplia variedad de temas, incluyendo menstruación, control de natalidad, cuidado en la preconcepción, enfermedades de transmisión sexual y actividad sexual. Muchas mujeres usan a su ginecólogo como su médico principal, así que para estas mujeres las visitas regulares también pueden representar una oportunidad para obtener inmunizaciones y otras revisiones.