Panorama General

Los riñones saludables son la tripulación de limpieza del cuerpo. Localizados bajo la caja torácica en la espalda baja, estos dos órganos gemelos en forma de frijoles, cada uno del tamaño de un puño, filtran el agua extra, minerales y toxinas vertidos en la sangre por otros órganos del cuerpo.

Los riñones procesan 18 galones de sangre cada hora con un sofisticado método de excreción, absorción y reabsorción. Al final de cada día, ellos pueden producir tanto como siete galones de orina.

Los riñones son de color café rojizo, sus lados cóncavos están orientados uno frente al otro. Están amortiguados en grasa, con únicamente las puntas de ellos protegidas por la caja torácica. Colocada encima de cada riñón hay una glándula suprarrenal, la cual produce muchas hormonas vitales. El riñón derecho está un poco más abajo que el izquierdo porque éste está apretado bajo el hígado, un gran órgano que ocupa una gran sección de la cavidad abdominal superior derecha.

En la sección cóncava del riñón hay una depresión que contiene vasos sanguíneos, nervios y la uretra, un tubo pequeño que saca orina del órgano y la baja a la vejiga. Las unidades que filtran la sangre del riñón son tubos microscópicos llamados nefronas.

Las causas que llevan a la enfermedad renal en estado terminal son la diabetes y la presión sanguínea elevada. Estas dos enfermedades afectan a los vasos sanguíneos y los riñones son ricos en estos. Controlar estas enfermedades puede llevar un largo camino a través de la prevención de la insuficiencia renal y la necesidad de diálisis.

Si sus riñones son normales, no necesitan cuidado especial. Una dieta saludable, balanceada y suficiente agua para saciar la sed son adecuados para mantener los riñones trabajando bien. Sin embargo, las dietas pasajeras, como aquellas muy altas en proteínas, pueden lastimar sus riñones. Beber muy poca agua o una abundancia excesiva de agua (más de 8 cuartos por día), puede también dañar estos órganos.

Otros diferentes a las enfermedades, los verdaderos asesinos de los riñones son los medicamentos; ellos deben pasar a través del riñón para ser filtrados hacia el torrente sanguíneo. Algunos antibióticos, medicamentos anestésicos y drogas antipsicóticas pueden dañar los riñones. Aun los analgésicos de venta libre, si se toman en dosis mayores, pueden llevar a insuficiencia renal.

Los químicos comunes de uso doméstico también pueden lastimar sus riñones. Los solventes químicos, alcohol de madera, tolueno, tetra cloruro de carbono (un líquido de limpieza) y glicol de etileno (anticongelante) pueden dañar los riñones si son ingeridos o inhalados. Sea muy cuidadoso al manejar cualquier químico y úselo de acuerdo a las indicaciones.