El tratamiento y control de lupus se centra alrededor de los medicamentos para minimizar la actividad de la enfermedad y prevenir brotes. Debido a que se desconoce la causa, sus mecanismos inflamatorios se enfocan a los medicamentos.

El lupus es una enfermedad crónica, de por vida. Muchas personas con lupus llevan vidas relativamente normales; algunas están moderadamente debilitadas y pocas están muy enfermas. La atención temprana en su estilo de vida puede ayudar a minimizar los efectos del lupus.

La complicación más peligrosa del lupus es la nefritis por lupus, la cual puede destruir su función renal y requerir ]]>diálisis]]> o un ]]>trasplante]]> para mantenerlo vivo. Medicamentos actuales ayudan a prevenir esta complicación.

El tratamiento involucra lo siguiente:

]]>Cambios en el estilo de vida]]>
]]>Medicamentos]]>
]]>Terapias alternativas y complementarias]]>

La cirugía no es una opción de tratamiento convencional para lupus. Sin embargo, si usted tiene nefritis por lupus y ésta conlleva a insuficiencia renal, podría necesitar someterse a un trasplante de riñón.