La infección con VIH quizás no cause síntomas por varios años o usted puede experimentar algunos síntomas tan pronto como en un lapso de 6-8 semanas después de haberse infectado. Durante una infección aguda de VIH, el virus se reproduce rápidamente, y el sistema inmune del cuerpo establece una defensa. El virus puede contagiarse a otra persona fácilmente durante este periodo.

Los síntomas iniciales pueden incluir:

  • Fiebre
  • Fatiga extrema e inexplicable
  • Nódulos linfáticos inflamados en las axilas, el cuello o en la ingle
  • Dolor de cabeza
  • Tos seca
  • Sudoraciones nocturnas
  • Sarpullido
  • Dolor de garganta
  • Dolor en las Articulaciones

Después de que estos síntomas iniciales desaparecen, quizás no haya síntomas durante meses o años, dependiendo de su estado de salud y de sus elecciones de estilo de vida. Quizás pasen hasta 10 años antes de que una persona con VIH desarrolle síntomas. Algunas personas infectadas han tenido el virus por periodos incluso más largos sin desarrollar síntomas. Aunque no haya síntomas, el virus se multiplica y daña al sistema inmune y puede transmitirse a alguien más.

Una vez que el virus ha debilitado suficientemente al sistema inmune, los siguientes síntomas pueden ocurrir en el transcurso de 1-3 años:

  • Glándulas linfáticas inflamadas en todo el cuerpo
  • Fatiga
  • Infecciones micóticas en la boca y en las uñas de las manos y pies
  • Infecciones vaginales repetitivas ( ]]>cándida]]> y tricomonas)
  • Desarrollo de muchas verrugas
  • Exacerbaciones de condiciones anteriores, como ]]>eczema]]> , ]]>psoriasis]]> e infección de ]]>herpes]]>
  • ]]>Herpes]]>
  • Fiebre
  • Sudoraciones nocturnas
  • Pérdida de peso
  • Presencia crónica de ]]>diarrea]]>
  • Pérdida de la memoria

Una vez que el VIH ha avanzado a SIDA, el sistema inmune se vuelve bastante débil y propenso a infecciones oportunistas, infecciones que las personas con un sistema inmune normal generalmente no padecen. Estas infecciones ocurren en personas con SIDA porque el sistema inmune no es capaz de combatirlo.

Ejemplos de infecciones oportunistas y de otras complicaciones del SIDA incluyen:

  • Afta (un crecimiento excesivo de cándida)
  • ]]>Neumonía]]> (particularmente Pneumocystis jiroveci [anteriormente, carinii])
  • Infecciones micóticas invasivas (provocando infecciones cerebrales y/o pulmonares)
  • Infección de toxoplasmosis
  • ]]>Tuberculosis]]>
  • Infección cerebral viral
  • ]]>Sarcoma de Kaposi]]>
  • ]]>Linfoma]]>
  • ]]>Cáncer cervical]]>
  • Enfermedad ocular debido a una infección de citomegalovirus
  • Infecciones intestinales, especialmente debido a las bacterias de shigella , salmonella y campylobacter
  • Pérdida severa de peso (síndrome consuntivo)
  • Severos sarpullidos de la piel
  • Reacciones a medicamentos
  • Problemas psiquiátricos, incluyendo ]]>depresión]]> y demencia

Los síntomas de estas condiciones (infecciones oportunistas y otras complicaciones del SIDA) incluyen:

  • Falta de aliento
  • Tos con esputo que contenga sangre
  • Problemas para deglutir
  • Confusión y olvidos
  • Diarrea severa
  • Náusea y vómito
  • Pérdida de la visión
  • Severos dolores de cabeza
  • Coma, pero sólo en casos muy severos de infecciones cerebrales virales o en casos terminales
  • Puntos rojos, cafés o morados en la boca o en la piel